jueves, 15 de octubre de 2009

CONVERSACIONES AJENAS


Conversaciones ajenas
Por: Rosita Fresita


Todos los días viajo alrededor de dos horas para llegar a mi trabajo, es lo malo de vivir tan lejos, creo que ese es uno de los males de las grandes ciudades, aún no tengo auto y creo en mucho tiempo no lo tendré, sinceramente no me llama mucho la atención, además cuando viajas en transporte público puedes hacer muchas cosas, como leer, escuchar música, una siesta o simplemente mirar el panorama de tu camino.

Generalmente mis trayectos ocurren con toda normalidad, a veces hasta me aburro; muchas de las personas que me acompañan en el viaje, se acomodan para continuar el tiempo de sueño que tuvo que ser interrumpido, a veces me da envidia la facilidad con que logran dormir.

Pero no todo puede ser siempre tan agradable, mi mal humor comienza a horas tempranas cuando se sube un hombre o mujer adictos a que escuchemos sus conversaciones por celular, odio que se la pasen hablando todo el camino, siento que no tenemos porque soportar su voz durante todo el viaje, lo peor es que ni siquiera tienen algo interesante que decir, al principio pensé que era adicción de adolescentes que no soportan estar mucho tiempo sin escuchar a su amorcito, ¡pero no!, no respeta edades, géneros y lo peor que día a día se propaga.

Creo que estas personas deberían tener un poco de conciencia cívica, como dice mi madre “el teléfono se hizo para acortar distancias, no para alargar conversaciones”, eso es muy cierto y debemos darle el uso adecuado a la tecnología, pero sobre todo respetar el derecho de las otras personas a viajar tranquilamente.

Una de las peores conversaciones que tuve que escuchar, fue cuando una vieja estaba seduciendo, cachondeando o teniendo sexo por medio del celular, ya sólo faltaba que se lo pusiera de vibrador, pero se clavan en su escena porque ni siquiera se dan cuenta de que todo mundo los escucha. Otra ocasión un tipo hablaba con su vieja, pero intercalaba frases en ingles mal pronunciadas, o que ni siquiera existen porque se las inventó tipo “pushar”, pero él se sentía soñado impresionando a su vieja que a lo mejor ni siquiera sabe hablar ingles.

Tampoco falta el que pone su música para todos, ¡¿Qué no saben que ya se inventaron los audífonos?!, recuerden que en gustos se rompen géneros y no porque sea la rola de moda quiere decir que a todos nos guste.

En fin espero nunca les toque viajar con este tipo de personas, porque simplemente les va a arruinar la mañana, o probablemente a mucha gente no le moleste enterarse de la vida ajena….

viernes, 9 de octubre de 2009

¿Las niñas bonitas tienen la vida resuelta?


El día de ayer me dí cuenta que en la vida cotidiana existen muchas injusticias, muchos dirán “¿apenas te diste cuenta? ¡¡¿Vivías en una burbuja?!!”, lo cierto es que creo mi nivel de paciencia llegó a un límite, me dí cuenta que a veces en el trabajo no es suficiente que seas puntual, responsable, trabajadora, sino que sigue predominando el instinto animal entre los que tienen el mando; ¿a qué me refiero? pues simple y sencillamente que muchos de los jefes se guían por lo que les dicta el pene…

Créanme siempre he sido defensora de las mujeres, pero llega el momento en que odio a algunos espécimenes de mi género. Si ya sé, seguramente al leer esto estas pensando: “es la típica amargada que odia a las bonitas”, pero mejor les expongo el caso que una amiga me contó:

Esta historia es de Liliana mi amiga y Elena la bonita, pues ellas trabajan en una misma empresa, pero en distintas sucursales de México, Liliana como les comentaba anteriormente siempre ha sido muy responsable, en el tiempo que lleva en su trabajo, ha tenido altas y bajas, a veces los aumentos de sueldo vienen cada año y eso porque no les queda de otra, hasta la fecha sigue preparándose porque le gusta y ama su trabajo. Afortunadamente, su forma de realizar sus labores la ha recomendado ante los demás y creo que nunca ha tenido queja alguna por parte de sus jefes, pero le ha costado mucho llegar hasta donde esta, porque todo lo obtiene mediante su esfuerzo…

Por otra parte, Elena entró tiempo después que Liliana, la diferencia es que desde un principio ha tenido muchas ventajas, por ejemplo, después de trabajar en la empresa un año decidió pedir un permiso, pero que probablemente para ya no regresar, su jefe que está enamorado de ella, obviamente se lo concedió y le dijo que podría regresar cuando quisiera. Al cabo de un año efectivamente regresó, con sus mismas ventajas y beneficios; lo curioso es que todos sus compañeros hablan pestes de ella porque comete tontería tras tontería, pero ella sabe que puede solucionarlo con una sonrisita idiota y coqueta para con su jefe…

Bueno mejor vayamos a lo que considero injusto, resulta que una amiga de Elena se casó y como el jefe de la empresa también estaba invitado pues obviamente se enteró del viaje, la injusticia radica en que le pagó el avión, hospedaje, alimentos etc y lo peor con el dinero de la empresa. Mientras que cuando Liliana necesita algún apoyo, simplemente le posponen o cancelan su petición. Hasta donde sé Liliana y su jefe no tienen que ver, pero el jefe es de los típicos tipos “perros”, que está buscando el momento en el que afloje.

Todo esto me lleva a hacerme muchos cuestionamientos, ¿será que el ser bonita te abre las puertas? ¿Será que la clave del éxito radica en coquetear lo más posible? ¿Será que en vez de superar el concepto de la mujer como “objeto sexual”, se prefiere seguir en la comodidad de usar tu encanto como arma?

Lo único que puedo decir es que en mi país seguimos viviendo en un atraso mental, pues pocos se detienen a ver las cualidades verdaderas de las mujeres y del potencial que pueden representar a nivel empresarial, limitándolas a una “vagina disponible” en algún momento…

En futuras entregas les platicaré más historias, con situaciones que a lo mejor alguna vez han vivido.